El Humanismo
El Humanismo es
la corriente intelectual y cultural que se desarrolla en Europa Occidental
durante los siglos XV y XVI y que tuvo como objetivo liberarse del pensamiento
dominante durante el final de la Edad Media, la Escolástica Católica. Se
caracterizó por:
- El antropocentrismo,
o interés por el hombre como centro del universo.
- La
admiración por la cultura de la Antigüedad griega y romana.
- El individualismo en
la búsqueda de la verdad mediante la razón y el estudio personal.
La difusión de
las obras de los humanistas y de los autores clásicos se vio favorecida por la imprenta,
inventada hacia 1440 por el alemán Johannes Gutenberg (1400-1468).
El desarrollo del Humanismo corrió parejo al
de la revolución científica:
- Nicolás
Copérnico (1473-1543)
formuló su teoría del heliocentrismo, según la cual el Sol era
el centro del universo y la Tierra giraba a su alrededor.
- Andrés
Vesalio (1514-1564)
impulsó el estudio de la anatomía humana,
y el español Miguel Servet (1511-1553) elaboró una avanzada
teoría de la circulación de
la sangre, junto a sus críticas de los dogmas religiosos por las
que fue condenado a la hoguera.
- Los descubrimientos
geográficos impulsaron otras ciencias, como la geografía, la botánica,
la zoología y la cartografía.
Pero el gran
impulsor del Humanismo fue el holandés Erasmo
de Rotterdam (1469 - 1536) quien inició la crítica sobre las supersticiones
y las malas prácticas de la Iglesia Católica, sus principales obras fueron El Enchiridion, donde aboga por una fe
cristiana racional y personal, y El
Elogio de la Locura, en la que critica no solo los excusos religiosos sino
también las injusticias sociales y políticas. Las obras y el estilo de Erasmo
ejercieron una gran influencia sobre los
autores españoles de los siglos XVI y XVII como Miguel de Cervantes o Francisco
de Quevedo.
La gran diferencia entre los humanistas y
los reformadores protestantes consistió en que los primeros nunca llegaron a
romper con la Iglesia de Roma, mientras los segundos si, creando nuevas
iglesias cristianas reformadas.
La Reforma
Protestante
Desde finales de
la Edad Media, se sentía la necesidad de emprender una profunda reforma
religiosa que acabara con los vicios y la corrupción de la Iglesia. Lutero, en
Alemania, fue el primero en romper con el dogma establecido, poniendo fin a la
unidad de la cristiandad occidental.
A principios del siglo XVI la imagen que
ofrecía la Iglesia indignaba a muchos cristianos, que no podían aceptar
prácticas como la compraventa de cargos
eclesiásticos, el lujo de los papas,
que se comportaban como príncipes autocráticos, la vida relajada de los clérigos y su escasa preparación.
Martin Lutero (1483-1546),
monje agustino y profesor de teología de la Universidad de Wittenberg, se
rebeló contra Roma cuando el Papa León X (1513-1521) ordenó, en
1517, la predicación de indulgencias,
es decir, el perdón de los pecados a cambio de limosnas para financiar la
reconstrucción de la basílica de
San Pedro.
El 30 de octubre de ese año Lutero fijó en
la puerta de la iglesia de Wittenberg sus noventa
y cinco tesis contra la doctrina católica. Los puntos principales de
su reforma eran:
- La justificación
por la fe: las personas se salvan sólo por su fe, y no por sus obras.
- El sacerdocio
universal: todos los creyentes pueden interpretar libremente los
textos sagrados.
- El
libre examen de la Biblia, con el rechazo de la tradición de
la Iglesia como fuente de la verdad y como autoridad en la interpretación
bíblica.
- Abolición
del celibato sacerdotal obligatorio.
- Reducción
de los sacramentos a dos: bautismo y eucaristía.
En Alemania las
ideas de Lutero se extendieron rápidamente, por estar dividida en múltiples
estados cuyos príncipes deseaban independizarse de la autoridad del emperador
Carlos V y del Papa. De este modo, la Reforma se convirtió en
un arma ideológica para justificar intereses políticos.
En Inglaterra, la misma
motivación política, impulsada por el deseo de reforzar la monarquía
autoritaria, propició la separación respecto a la Iglesia de Roma cuando Enrique
VIII (1509-1547) decidió crear la Iglesia anglicana (1534).
En Suiza, la Reforma tuvo como
protagonistas a Juan Calvino (1509-1564), quien instauró
en Ginebra un gobierno religioso basado en la doctrina de la predestinación. Fue Calvino y el
gobierno de Ginebra quienes condenaron a la hoguera al humanista español Miguel
Servet, irónicamente llevando a cabo una condena que ya había recibido de la
inquisición del Papa.
El Calvinismo se propagó por los Países
Bajos, Escocia (presbiterianos),
Inglaterra (puritanos) y Francia
(hugonotes).
La consecuencia principal de la Reforma fue
la división de Europa en diversas confesiones enfrentadas. Tras la paz
de Augsburgo (1555) entre Carlos V y los príncipes protestantes
alemanes, se impuso la idea de que los súbditos estaban obligados a abrazar la
religión de su señor, según la fórmula cuius regio, eius religio («tal
es su país, tal su religión»), esto presuponía el reconocimiento de que la
unidad religiosa católica se había roto
El
Concilio de Trento y la Contrarreforma
La Iglesia
católica también tenía un anhelo de reforma, pero la verdadera reacción sólo
tuvo lugar cuando se comprobó que el acuerdo con los protestantes era
imposible.
El resultado fue la Contrarreforma,
cuyos principios eran opuestos a los de la Reforma de Lutero. El Concilio
de Trento (1545-1563) fue convocado por el Papa Paulo III para fijar el dogma católico
y crear nuevos medios de difusión de la doctrina.
Las consecuencias inmediatas del Concilio
fueron:
- El dogma:
se mantuvieron la creencia en la salvación por la fe y también por las
obras, los siete sacramentos, el celibato sacerdotal y el culto a la
Virgen y los santos; se ratificó la posición del Papa como cabeza de la
cristiandad y la autoridad exclusiva de la Iglesia para interpretar los
textos sagrados.
- Nuevos medios: se
crearon los seminarios para mejorar la educación del
clero, se fundaron numerosas escuelas, se estableció el catecismo y
se intensificó la labor misionera en otros continentes.
- La Compañía
de Jesús, fundada en 1540 por el vasco San Ignacio de Loyola (1491-1556),
esta organización fue el principal apoyo de los papas para poner en
práctica la Contrarreforma.
ACTIVIDAD: Lee el siguiente fragmento de Miguel Servet
y responde:
Con mis propios ojos he
visto yo mismo cómo lo llevaban con pompa al Papa sobre sus hombros los
príncipes, fulminando cruces con la mano, y cómo lo adoraba todo el pueblo de
rodillas a lo largo de las calles. Llegaban al extremo de que los que podían
besarle los pies o las sandalias se consideraban más afortunados que los demás
y proclamaban que habían obtenido numerosas indulgencias, gracias a las cuales
les serían reducidos largos años de sufrimientos infernales.
Restitución del Cristianismo. 1553
- ¿Qué opinión albergaba Servet hacia el poder
de los Papas y por qué?
- ¿Qué consecuencias
tuvo expresar estas ideas?